Soria rendirá homenaje a Javier Marías, escritor muy ligado desde su infancia a la ciudad numantina
El jueves 23 de febrero, a las siete de la tarde en el Casino de Soria, que celebra este año su 175 aniversario, el Centro Internacional Antonio Machado (CIAM), la Fundación Duques de Soria (FDS), el Centro de Estudios Sorianos (CES) y Soria Edita organizan un homenaje al escritor Javier Marías recientemente fallecido. Participan el crítico de cine y hermano del escritor Miguel Marías, el periodista y escritor Juan Cruz, la editora de Penguin Random House Pilar Reyes y el profesor Emilio F. Ruiz, que dirigirá el acto.
Javier Marías (Madrid, 1951-2022), escritor, traductor, editor, licenciado en Filología Inglesa, profesor en varias universidades de España, Europa y América, ha sido uno de los principales escritores españoles contemporáneos. Desde muy joven se dedicó a escribir y entre 1971 y 2021 fue autor de dieciséis novelas, algunas traducidas a decenas de lenguas y en multitud de países. Además escribió relatos, cuentos y cientos de artículos en periódicos y suplementos literarios de España y del extranjero. La calidad de su obra ha sido reconocida por la crítica mundial y por el mismo motivo recibió numerosos premios literarios de gran prestigio. En 2008 fue elegido miembro de la Real Academia Española.
Entre 1952 y 1969, con alguna visita esporádica a partir de entonces, pasó junto a su familia los veranos en Soria. En la ciudad que los acogió, su padre, el filósofo y escritor Julián Marías y su madre, la escritora Dolores Franco, continuaron trabajando con la misma energía que en Madrid, pero con mayor holgura, mientras sus hijos se tonificaban y actuaban con libertad. En Soria, trabaron amistades y les fueron sucediendo multitud de aventuras, aquéllas que articulan la vida y le dan espesor. Estos recuerdos, muchos años después, probablemente lo trajeron de vuelta a Soria, donde abrió casa y continuó su dedicación a la escritura, lo que vino haciendo durante varios años y en cualquier época: «Nadie sabía dónde estaba, porque estaba donde no estaba nadie».